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Sergio Soriano

El miedo a reparar tarjetas electrónicas (La filosofía del cambio)


El mantenimiento electrónico no es algo tan generalizado como parece, en la mayoría de las industrias de hoy en día, particularmente la pequeña y mediana industria no tienen personal técnico propio. Esto significa que el mantenimiento no existe, solo practican reparaciones o reparamientos. Es como el dicho de “solo abrir el manual cuando se rompe”

La filosofía en el mantenimiento electrónico a día de hoy es detectar la tarjeta del conjunto electrónico que está en falla y reemplazarla por una nueva. Esto siempre y cuando se tenga stock o el fabricante tenga repuestos. Pero cuando no es así, y el fabricante no tiene repuesto o no proporciona soporte nunca más para ese modelo o la tarjeta es muy cara, es cuando cunde el pánico y la gente empieza a correr sin rumbo igual que cuando tapas un hormiguero.

Cuando surge una avería, esto puede hacer parar toda una producción durante el tiempo que dure la misma, este tiempo se va a haber afectado por distintos factores dependiendo de la situación de la empresa. Pero en la mayoría de los casos se trata de la disponibilidad del técnico, o la rapidez de la empresa que haga tus reparaciones, o la llegada de un nuevo repuesto. Todo esto puede ocasionar clientes insatisfechos por los retrasos en la entregas.

Si esto acurre habitualmente, en el mejor de los casos la empresa se da cuenta de que este tipo de incidentes ya no se trata tan solo de reparar una avería. Un fabricante que tiene habitualmente estos problemas puede verse condenado al fracaso. No se puede dar un plazo al cliente y que su producto se retrase por una avería. También hay que entender que el cliente suele ser un intermediario, que también ha dado su propio plazo de entrega, y deberá dar muchas explicaciones.

LA SOLUCIÓN

¿Cómo suelen solucionar esto las empresas?

Me gustaría decir que hacen un estudio de cuantas averías tiene por mes, cual es el volumen de tarjetas averiadas anualmente y cuanto se están gastando al año tan solo en mto. Electrónico, pero no es así. Tampoco es que se pongan a definir una estrategia para dar los pasos más adecuados, no!

Lo que ocurre en la práctica, es que buscan a un “pardillo”, normalmente un técnico con poca experiencia en gestión, para así poder pagarle un salario “regular”. El técnico, con toda su voluntad, vocación y ganas de demostrar de lo que es capaz, se buscará la vida para crear un sistema de mantenimiento en condiciones y apañarse con las herramientas que tiene. O simplemente contactan con personal o empresas exteriores para solventar aquellos puntuales problemas.

Esto a lo largo de los años genera mucho gasto para las compañías, desde la más pequeña hasta las industrias más grandes. El miedo a la reparación electrónica viene también dado por las gerencias en las empresas.

¿Por qué fracasa un plan de mantenimiento?

Porque el plan de mantenimiento no lo hace un técnico, ni siquiera un ingeniero jefe de mantenimiento. El plan de mantenimiento lo hace la gerencia. El dueño, el administrador, la junta directiva, o quien tome las decisiones estratégicas de más alto nivel.

A lo mejor te has quedado un poco sorpreso con lo que te acabo de decir.

Pues ahora lo vas a entender.

La estrategia de mantenimiento debe partir de esta base:

¿Qué objetivos quieres conseguir con el sistema de mantenimiento? Reducir los tiempos de parada, reducir el coste de las intervenciones, llevar toda las reparaciones de manera interna, prever las paradas para planificar la producción, etc.

¿Cuáles son las prioridades? Es más importante seguir el plan previsto o aguantar al máximo para no parar las máquinas.

¿Qué recursos serán necesarios? Aplicaciones informáticas, personal, formación, consultores, invertir en un laboratorio propio y maquinaría de diagnóstico.

¿Qué se está dispuesto a sacrificar? Si habrá personas que perderán capacidad de decisión, si habrá que perder producción puntual para mejorar la continuidad, etc.

¿Quienes serán los responsables de la elaboración del plan? Definir las competencias, para que no surjan conflictos, manejo de las cualidades técnicas, preguntar opiniones ante el reto de la reparación electrónica.

Definir una hoja de ruta. Hay que planear los pasos y las fechas en que se van a dar. Si no se definen plazos, todo se puede alargar indefinidamente. Si parece que no se va a cumplir un plazo, hay que actuar antes, para ver si hace falta reforzar algo, o simplemente modificar la hoja de ruta.

Desde el momento en que la empresa delega todo este trabajo únicamente sobre un técnico, que además suele ser alguien joven y recién llegado a la empresa, lo mejor que puede pasar es que las cosas acaben mejorando ligeramente. En ese caso el técnico es casi un héroe. Lo normal es que el plan quede colgado, el técnico abandone la empresa y venga otro, para repetir todo el ciclo con el mismo resultado.

Conclusión:

Hoy en día la reparación electrónica no es tan complicada si se tiene la herramienta y el personal adecuado. Con estos dos recursos mencionados, una empresa puede ahorrarse mucho dinero al año llevando el mantenimiento electrónico internamente. Empresas que han conseguido implementar una estrategia de mantenimiento interna no han ahorrado directamente, sino que han dejado de gastar los montos que gastaban antes, invirtiendo en tecnologías que facilitan a los técnicos llevar la reparación de PCBs de una manera rápida y eficiente y haciendo que toda la experiencia y sabiduría de los técnicos no dependan de una persona apenas, sino sean propiedad de la compañía. Estas empresas, gracias a llevar un historial de fallas, hacen que los técnicos se dirijan directamente a la raíz del problema ahorrando muchas horas a los técnicos. Para más información sobre extrategias y técnicas de reparación no dejes de ver Aun no sabes por donde empezar. …….

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