¿Tienes un proceso estándar y procedimientos para la detección de fallos que conducen de forma lógica a la reparación? Si no, estás haciendo un diagnóstico personalizado a la tarjeta. Cuando no contamos con un procedimiento de prueba predeterminado o un TestFlow de la tarjeta, un técnico entrenado en reparación electrónica puede determinar de una manera eficiente que es lo que está mal y probablemente averiguar cómo solucionarlo.
Para equipos críticos, confiar en un diagnóstico personalizado deja mucho espacio a la suerte. Es poco probable que tus técnicos estén siempre preparados para responder cuando un equipo critico presenta un fallo. ¿Qué pasa cuando sólo los técnicos que no están familiarizados con ese equipo están disponibles? ¿Y la presión para solucionarlo es alta?, ahí es cuando se basan en suposiciones.
El conocimiento de cómo determinar que es lo que está mal y arreglarlo debería estar determinando en procesos predefinidos. Idealmente, las instrucciones pueden estar en un Flowchart de acciones o en un TestFlow, donde un técnico sea capaz de proceder rápidamente hasta llegar a solucionar el problema.
Por ejemplo, una rutina básica de acciones para diagnóstico electrónico basado en un TestFlow.
Gracias a software y a los sistemas de diagnóstico disponibles en el mercado es posible hacer este trabajo de "suposiciones" mucho más fácil y predefinido en rutinas de acción para los técnicos. En el siguiente video se ilustra un ejemplo: https://www.youtube.com/watch?v=607Arl4N5Bc